Tradicionalmente nos han educado en la idea de que el conflicto es algo dañino y destructivo. Tal es su estigmatización que se suele hacer un importante ejercicio de negación cuando éste aparece.
Es fácil escuchar frases como “en mi equipo de trabajo no hay conflictos” “no tengo conflictos con mi compañero/a de trabajo” etc.
Pese a esta fantasía de silenciarlo o dicho en otras palabras de “apretar los dientes y hacer como si no estuviera pasando nada”, la realidad es que en cuanto interactuamos con otras personas tenemos garantizado el conflicto. Es inevitable que surja, pues nuestras relaciones están impregnadas de emoción (incluso en el ámbito laboral) y eso lleva a que la alegría, la satisfacción, la diversión, la decepción, el enfado, la envidia, etc. tengan un importante protagonismo.
Desde esta perspectiva, si se acepta que el conflicto forma parte de las relaciones humanas más que tratar de esconderlo como sea, conviene pensar qué se puede hacer con él.
Una opción consiste en tratar de reducirlo al máximo (por ejemplo, promoviendo un clima en que los/as trabajadores/as se sientan escuchados y tenidos en cuenta).
Otra posibilidad pasa por entender que cuando se aborda un conflicto adecuadamente se está promoviendo un cambio dirigido hacia la mejora y el crecimiento. El origen del conflicto siempre está en “algo que no está funcionando adecuadamente”, por lo que buscar una solución alternativa, nos llevará a una situación de cambio.
Por ejemplo, si el sistema de turnos de un equipo no satisface a los/as trabajadores y genera conflictos continuos, caben 2 posibilidades: la primera consiste en evitar hablar de ello, lo cual generará mal ambiente, disminuirá la motivación, la tarea se verá afectada de un modo u otro, etc. y tarde o temprano el conflicto terminará estallando (a menudo por un hecho aparentemente poco relevante). La segunda consiste en poner palabras a lo que está sucediendo y buscar una alternativa al sistema de turnos. Cuando se opta por esto último, además de resolver el conflicto, se genera un cambio que a su vez también contribuye al crecimiento del grupo.
Rivendel Grupos y Organizaciones